Boda de Mónica y Pedro en Las Torres de Cotillas: una historia de confianza, emoción y momentos inolvidables

Cuando Mónica y Pedro vinieron a verme por primera vez, lo tuvieron claro desde el primer minuto: “Vas a ser tú”, me dijeron sin rodeos.
Así empezó nuestra historia juntos, una historia que acabó convirtiéndose en una de las bodas más emotivas y auténticas que he tenido el privilegio de fotografiar.

Comunicación y confianza: la base para una boda perfecta

Como fotógrafo de bodas, no solo me limito a capturar momentos; acompaño a las parejas en todo el proceso.
Desde ese primer “sí” en la reunión, estuve en constante comunicación con ellos, resolviendo dudas, aconsejando, y ayudando a que todo estuviera bajo control.
En nuestra última reunión, cerramos horarios, detalles, posibles imprevistos… todo con un único objetivo: que ellos solo tuvieran que disfrutar.

Preparativos llenos de emoción

El gran día comenzó temprano. A las 7:30 ya estaba con Mónica en la peluquería, en un momento íntimo y relajado donde empezamos a capturar los primeros instantes de un día irrepetible.
Después, me trasladé a casa de los padres de Pedro, donde comenzamos a retratar los detalles y los momentos únicos junto a su familia y amigos más cercanos.

Ambos vivieron sus preparativos en familia, con mucha complicidad, cariño y nervios a flor de piel.
Esos momentos previos, entre miradas, abrazos y risas, son oro puro para mí como fotógrafo.

Una ceremonia mágica en Las Torres de Cotillas

La iglesia de Las Torres de Cotillas fue testigo de una ceremonia muy especial.
Familiares y amigos llenaron cada rincón con amor y emoción.

Hubo intervenciones, lágrimas y muchas sonrisas.

Y justo al salir, un detalle inesperado: una amiga lanzó arroz y cava al aire para celebrar.

Un momento espontáneo que quedó inmortalizado para siempre.

Celebración en Jardín de la Estación, Lorquí

La celebración tuvo lugar en el precioso espacio Jardín de la Estación, en Lorquí.
Antes de entrar, los coches —una pasión compartida por los novios y los amigos— se organizaron para una pequeña “exhibición” muy especial.
Allí realizamos una pequeña sesión entre jardines y coches, con un aire elegante y desenfadado, justo como ellos.

Durante el cocktail, la comida y el baile, todo fue alegría.
No faltaron las sorpresas, los regalos, los abrazos y un montón de momentos espontáneos que hacen únicas a cada boda.

El primer baile fue solo el inicio de una fiesta en la que todos, familiares y amigos, se unieron para celebrar el amor.

Mi manera de contar bodas

Cada boda es única, y mi objetivo como fotógrafo es que cada pareja tenga un recuerdo fiel, natural y lleno de emoción de su gran día. Gracias, Mónica y Pedro, por confiar en mí sin dudarlo ni un segundo. Ha sido un auténtico placer ser testigo y narrador de vuestra historia.

¿Estás buscando fotógrafo para tu boda?

Si te ha gustado esta historia y quieres que tu boda también sea contada de forma natural, cercana y emotiva, estaré encantado de acompañarte en ese día tan importante. Vivo cada boda como si fuera la única, con dedicación, empatía y muchísima pasión por lo que hago.

📍 Trabajo en Las Torres de Cotillas, Murcia y me desplazo a donde haga falta.

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